Substancia



La geometría de los árboles que se agolpan en el camino
Las músicas como cristales molidos,
el ruido del motor, el ángel exterminador.
© Juvenal Machín Casañas
Voy a tu encuentro y ya no siento el peso
me substancio allí donde no hay espejos
propulsado por un tambor de hojalata
mientras me late la razón.

Y ahora bien quisiera ser niño aferrado a tu teta
memoria que se recrea en tus ojos cerrados
quisiera ser compañero de viaje
sonrisa, láudano, eterno aspirante
desayuno para dos.

Entonces sucede
que rebusco saber qué quieres, quién eres
tú, la improbable combinación de átomos,
un regalo del tiempo
girando en la rueda de mis brazos
ateridos.

Y yo allí en el fondo,
en lo más profundo del silencio
te estoy llamando:
¿Cuánto de ti permanece en las costuras?
¿Cuánto de mí mañana en tus manos?
¿qué puedo hacer, dime, con esta isla de náufrago?

Tomarte fotos continuamente
para que no me olvides
me crees un tonto y no lo soy.

(© Juvenal Machín Casañas)

No hay comentarios:

Publicar un comentario